Hermosos días de romería los celebrados por la Hermandad del Rocío de Antequera




La Hermandad del Rocío de Antequera peregrinó hasta la Aldea del Rocío junto a su Hermandad madrina de Sevilla y la Hermandad filial de El Viso del Alcor.

El pasado jueves, 17 de mayo, en Sevilla, comenzó el peregrinar de la Hermandad hasta las plantas de la Virgen del Rocío. Allí tuvo lugar la misa de envío de romeros en la que acompañó a la Hermandad de Antequera el alcalde, Manolo Barón, y la teniente de alcalde, Ana Cebrián.

El camino ha transcurrido por donde tradicionalmente peregrina la Hermandad de Sevilla. Tras un primer día de sol, se llegó a la pernocta en Cuatrovitas, donde se acampó y se realizó la convivencia entre todos los peregrinos.

Ya en el segundo día de camino, se anduvo tras el Simpecado donde se llegó al Vado de Quema, allí se realizaron los simbólicos bautizos de los nuevos rocieros que realizaban el camino por primera vez. Pernocta en la Finca el Caoso donde, desde la entrada, se realizó el rezo del rosario y posterior eucaristía.

Amanecía el último día de camino, en las arenas que conducían hasta el Santuario de la Virgen del Rocío, donde a las 17 horas se realizaba la presentación ante la Blanca Paloma en la que se pudo ver una estampa única, los dos Simpecados juntos, el de la madrina, la Hermandad del Rocío de Sevilla, y la nueva Hermandad Filial de El Viso del Alcor. Ya el domingo se participó en la misa Pontifical y en el rosario de Hermandades tras el que tuvo lugar la procesión de nuestra Señora del Rocío.

Con la gracia del Espíritu Santo, y regresados a la ciudad de Antequera, sólo queda dar gracias por los frutos cosechados en Pentecostés. Por ello, el próximo viernes, 25 de Junio, a las 20:30 horas, tendrá lugar la misa de Acción de Gracias.

La Hermandad de Ntra. Sra. del Rocío de Antequera, presidida por Emilio Córdoba, quiere agradecer públicamente el buen hacer y ejemplo demostrados por todos los peregrinos de su Hermandad, así como a las personas que los han acompañado y apoyado, hechos que ponen de manifiesto el crecimiento espiritual de ésta corporación.