¿Y si al ser rociero te haces buen cristiano?

Para ser buen rociero, primero hay que ser cristiano… Así dice la letra de la conocida sevillana, pero ¿y si al ser rociero te haces buen cristiano?

Siempre me he considerado cristiana, pero no muy practicante, lo que sí tenía claro era mi sentir por nuestra Madre del Rocío, sin que me viniera de cuna y sin conocer ningún tipo de ambiente rociero. Solo sentía algo muy grande, algo que me llamaba sin saber porqué, y que cuando pudiera yo sería rociera. Rociera me sentía, pero el vivir un camino, el poder sentarme en esa ermita y pasar todo el tiempo rezando y mirándola.

Pues pasaron los años y todo fue querer saber y aprender más de nuestra bendita Madre del Rocío, y el ir a verla cada vez que podía, fuera romería o no y, claro, eso te enseña que nuestra Madre tiene en sus manos a su bendito Hijo, nuestro Señor, el que siempre está para cuando lo necesitamos, que lo es todo para los creyentes, nos enseña a ser mejores personas, con el que podemos contar siempre, Él es Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Me siento cristiana y rociera, orgullosa de mis creencias y de poder decirlo a boca llena.

El Rocío es Fe, Hermandad, amor y, sobre todo, cristiandad.

No podemos ser rocieros “tan solo al año una vez” y cuando digamos “soy rociero”, también digamos “soy cristiano”. Que la Virgen del Rocío nos enseñe a engrandecer nuestra fe.

Sí, soy rociera y cristiana, y orgullosa estoy de decirlo, porque nuestra Madre solo nos enseña cosas buenas y porque soy una de las que dice que “voy al Rocío por fe”.

¡Viva la Virgen del Rocío!
¡Viva la Blanca Paloma!
¡Viva el Pastorcillo Divino!
¡Viva la patrona de Almonte!
¡Vivan todos los rocieros!
¡Vivan todas las Hermandades!
¡Viva la Hermandad Matriz de Almonte!
¡Y que viva la Madre de Dios!

María Isabel García
Hermana Mayor de la Hermandad del Rocío de Estepona