Celebraciones fundacionales de las Hermandades del Rocío




Cada año, alguna Hermandad celebra su año fundacional. Cada año somos sorprendidos por una de las 124 hermandades filiales de la Hermandad Matriz de Almonte, que nos indican que están de fiesta porque cumplen años de Rocío en su historia.

Una década no parece demasiado, pero sí es bastante tiempo como para sentar las bases de lo que se desea transmitir a los demás, participando de la vida de una Hermandad del Rocío.

Veinte años son suficientes para aprender a saltar obstáculos, comenzar a hacer del patrimonio una reliquia en el recuerdo y en el corazón, fomentar lo bueno, borrar errores y seguir caminando.

Con cinco años más, la Hermandad celebra sus bodas de plata, todo un acontecimiento, porque es bastante probable que vivan hermanos fundadores que pueden festejar por todo lo alto el momento.



Y así podríamos ir sumando y sumando hasta encontrarnos con aquellas que cumplen cincuenta, setenta y cinco, cien, ciento cincuenta… Y las más antiguas siglos de historia rociera.

Para no nombrar a unas y, sin querer, dejar de nombrar a otras, deseo de forma genérica, felicitar con las líneas editoriales de este día, a las que han clausurado sus actos, por el mimo y el esfuerzo desembolsados para que todo saliera bien, y a las que inician sus celebraciones, para contarles al mundo que todo lo vivido ha servido de algo, que todo lo andando ha merecido la pena y que lo que queda por andar siempre desemboca en la luz de la mirada de los ojos de la Virgen del Rocío, y en la graciosa sonrisa que el Pastorcito Divino dedica a toda persona que en Él y en su Madre ponen su confianza.

Que a todas, la Virgen, siga dándole salud y fuerza para cada año llegar a sus plantas fortalecidas y llenas de esperanza y encontrar el consuelo, eternamente, bajo su manto.

Francisca Durán Redondo
Directora de periodicorociero.es