¡No tengas miedo!




Una nueva semana, un nuevo día, nuevas ilusiones y la misma o mayor fidelidad a los objetivos marcados.

Se avecinan tiempos de esperanza. No tengas la mínima duda de que esto es así. Si dudas, es cuando estás perdido. Si crees, avanzarás y sentirás la mano de Dios llevándote con cuidado y su mirada trazándote la senda.

Has depositado en el corazón de la Virgen del Rocío la carga con la que no podía tu corazón. Y acertaste. ¡Ya estás a salvo! Para experimentar esa salvación sólo te hace falta que tu confianza sea más fuerte que la roca y tu Fe más firme que el cielo, que permanece cada día sobre nosotros, con la salida del sol y con su ocaso.

Afianza tus propósitos y ejercita tu voluntad. Elabora un plan de AMOR con letras gigantes y ve a por él. ¡No tengas miedo! La Virgen perdió todos sus temores cuando el Ángel Gabriel le dijo: “El Señor está contigo” y a ti no te abandonó en ningún momento.

Es el mejor día para cambiar radicalmente la piedra dura de tu alma y dejarte transformar por las manos pacientes del mismo que te creó.

La Virgen intercede, el Pastorcito actúa y Dios obra el milagro. Pon tus alegrías y tus penas en las manos de la Virgen, en ellas encontrarás siempre a Jesús; pídele a Él que actúe en tu favor que, verás cómo el Espíritu de Dios, blanquea tu alma con sus alas amorosas para que el milagro se haga realidad.

Francisca Durán Redondo
Directora de periodicorociero.es