Al estrenar febrero…



Hoy estrenamos mes. Arranca febrero dejando atrás un mes que nos hace doblar página definitivamente a la vorágine de fiestas y gastos, -muchas veces innecesarios-, movidos más por el consumismo afanoso que por otros valores de verdadera importancia.

Arranca febrero, sí, y ponemos el pie en el acelerador, no porque queramos correr, sino para seguir caminando con pie firme hacia metas que nos parecen inalcanzables pero a las que llegaremos, persistiendo y perseverando en el trabajo, marcando pautas y siguiéndolas, sin apartarnos de la fe y manteniendo nuestra esperanza anclada en el que todo lo puede.

Y en febrero, en alguna de las hojas de su calendario, también nos encontraremos como protagonista a la Virgen, en alguna de sus queridas advocaciones.

Febrero también nos llevará al Rocío, ante la imagen de la reina marismeña, ante Ella renovaremos nuestros corazones agradecidos, a sus pies acudiremos para buscar su auxilio y protección, en su regazo buscaremos el consuelo necesario para seguir viviendo, en sus ojos encontraremos la luz para continuar el camino y abrazados a Ella respiraremos seguros.

De cada día esperamos mucho, pero de quien esperamos todo es de Dios, que con la intercesión de María, nuestra Madre, no nos dejará ni un solo segundo, Él atiende con diligencia los ruegos de tan fiel mediadora y a nadie que recurre a Ella para llegar a Él lo deja de su mano.

Con total confianza le encomendamos este día y este mes, y se lo confiamos sabiendo que no será en vano poner en sus manos todo lo nuestro para que nos ayude en nuestros propósitos y consigamos lo que anhelamos para bien de nosotros y de aquellos a quienes queremos.

Francisca Durán Redondo
Directora de periodicorociero.es